La simulación en salud pública, en línea con el Plan de Acción Global para la Seguridad del Paciente 2021-2030, es fundamental para mejorar la seguridad, la calidad y el acceso a la atención sanitaria global. Proyectos como el Laboratorio de Simulación en Salud Pública de Padua muestran cómo la simulación aborda retos cruciales, desde la formación sanitaria hasta la gestión de emergencias, contribuyendo a reducir las desigualdades y a promover la innovación en los sistemas sanitarios. Un enfoque estratégico para alcanzar los objetivos globales de salud y seguridad.
En 1969, Neil Armstrong, al poner el pie en la Luna, pronunció la famosa frase: «Un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad». Al igual que aquel pequeño paso de Armstrong supuso un avance histórico para toda la humanidad, una integración inteligente de la simulación en el contexto de la salud pública podría representar un pequeño pero significativo paso cultural hacia una mayor seguridad y calidad de la atención sanitaria, incluso en los países de ingresos bajos y medios. ¿Nos hemos atrevido con una metáfora demasiado ambiciosa? Quizás sí, quizás no. En un mundo en el que 1 de cada 10 pacientes en los países de ingresos altos sufre un evento adverso durante la asistencia sanitaria y en el que, en los países de ingresos bajos y medios, hasta 1 de cada 4 pacientes sufre algún daño, con 134 millones de eventos adversos al año y alrededor de 2,6 millones de muertes, es evidente que la calidad de la atención sanitaria es un reto urgente. Casi el 60 % de las muertes en los países de ingresos bajos y medios se atribuyen a una atención sanitaria de baja calidad o insegura (1). En un contexto cada vez más avanzado tecnológicamente, es fundamental garantizar que herramientas como la inteligencia artificial y los enfoques educativos innovadores, como la realidad virtual y el metaverso, no sigan siendo privilegio exclusivo de los países más ricos, evitando así alimentar aún más las desigualdades sociales, educativas y de acceso a servicios de calidad.
La simulación en la salud pública y los Objetivos de Desarrollo Sostenible
En este escenario, la simulación puede ser un recurso eficaz para abordar retos clave de la salud pública, como la prevención de infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria, la gestión de epidemias y emergencias, la medicina de catástrofes y la preparación en salud pública. Puede contribuir a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), entre ellos: garantizar la salud y el bienestar para todos (ODS 3), garantizar una educación inclusiva y de calidad (ODS 4) y reducir las desigualdades dentro de los países y entre ellos (ODS 10)(2).
Estamos convencidos de que la introducción y la adopción generalizada de la simulación en la salud pública pueden favorecer una transformación cultural y sistémica con repercusiones a nivel mundial. Y no somos los únicos que lo creemos. En la Call to Action del Plan de Acción Mundial para la Seguridad del Paciente 2021-2030 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay un claro llamamiento a implementar programas basados en la simulación, dirigidos a todas las partes interesadas: gobiernos, servicios sanitarios y mundo académico.

Siete aspectos clave de la simulación en la salud pública
En los últimos años, la simulación ha demostrado un enorme potencial en el ámbito clínico, pero también está emergiendo como una herramienta clave en la salud pública, gracias a una floreciente proliferación de aplicaciones innovadoras. Además de mejorar la preparación de los profesionales sanitarios, esta innovadora metodología de enseñanza e investigación está contribuyendo a reforzar la eficiencia y la seguridad de los sistemas sanitarios, ayudando a reducir las desigualdades en el acceso a servicios de calidad. Desde esta perspectiva, recientemente hemos publicado en Frontiers in Public Health el artículo Shaping the future of healthcare: improving quality and safety through integrating simulation into Public Health education, que destaca la necesidad y la urgencia de integrar la simulación en la salud pública y comparte una propuesta concreta en este sentido (3). Con este fin, hemos destacado siete aspectos de la simulación que consideramos especialmente relevantes:
- Educación y mejora de la calidad: estandariza la formación sanitaria, mejorando así la asistencia y la equidad en el acceso a servicios de calidad.
- Ahorro económico: reduce los costes asociados a los errores sanitarios y a las ineficiencias del sistema sanitario.
- Competencias no técnicas y factores humanos: potencia el liderazgo, la comunicación y el trabajo en equipo.
- Mejora de los resultados clínicos: reduce los eventos adversos y mejora la calidad general de la atención.
- Participación de los pacientes y cuidadores: promueve una mayor participación y concienciación.
- Oportunidades de investigación e innovación: ofrece un entorno seguro para experimentar nuevas tecnologías y metodologías.
- Enfoque ético y aprendizaje seguro: promueve un aprendizaje que no compromete la seguridad de los pacientes y los profesionales.

El Padua Public Health Simulation Lab: un pequeño paso hacia un gran cambio
Para construir esta visión, se ha puesto en marcha el proyecto Padua Public Health Simulation Lab (PPHSL), una iniciativa nacida de la colaboración entre académicos, profesionales sanitarios y estudiantes de la Universidad de Padua en el contexto de la Escuela de Especialización en Higiene y Medicina Preventiva, los cursos de licenciatura en medicina y las profesiones sanitarias. Este proyecto responde al llamamiento del Plan de Acción Mundial para la Seguridad del Paciente 2021-2030 de la OMS y se alinea con las Líneas directrices sobre el desarrollo de la simulación en la sanidad en Italia, publicadas por el Ministerio de Sanidad en julio de 2022 (4).
El objetivo principal del PPHSL es promover la integración de la simulación en los programas de salud pública, fomentando el desarrollo de competencias tanto técnicas como no técnicas, como el liderazgo, la comunicación eficaz y el trabajo en equipo. El proyecto está dirigido a profesionales de la salud en formación básica y de posgrado, con especial atención a temas como las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria y la resistencia a los antimicrobianos; la higiene de las manos; la gestión de riesgos; la reticencia a la vacunación; y las emergencias sanitarias.
Según Sir Donald Acheson, la salud pública es «la ciencia y el arte de promover la salud, prevenir las enfermedades y prolongar la vida» (5). A la luz de esta definición, ¿considerar la simulación como un recurso estratégico indispensable para la salud pública es solo una visión ambiciosa o una oportunidad que sería insensato no aprovechar?
Para saber más:
Baldovin T, Bassan F, Bertoncello C, Buja A, Cocchio S, Fonzo M, and Baldo V (2024) Shaping the future of healthcare: improving quality and safety through integrating simulation into Public Health education. Front. Public Health 12:1446708. doi: 10.3389/fpubh.2024.1446708
Grupo de trabajo Padua Public Health Simulation Lab:
Dr. Laura Bilato, Dr. Daniele Calò, Dr. Linda Compagno, Dr. Valentina Zanella, Dr. Veronica Salvò, Dr. Francesco Bassan.
Bibliografía:
1. Global Patient Safety Action Plan 2021-2030 [Internet]. [cited 2023 Dec 12]. Available from: https://www.who.int/teams/integrated-health-services/patient-safety/policy/global-patient-safety-action-plan
2. THE 17 GOALS | Sustainable Development [Internet]. [cited 2024 Apr 10]. Available from: https://sdgs.un.org/goals
3. Baldovin T, Bassan F, Bertoncello C, Buja A, Cocchio S, Fonzo M, et al. Shaping the future of healthcare: improving quality and safety through integrating simulation into Public Health education. Front Public Health. 2024;12:1446708.
4. Ministero della Salute. Linee di indirizzo sullo sviluppo della simulazione in sanità in Italia [Internet]. [cited 2023 Dec 11]. Available from: https://www.salute.gov.it/portale/documentazione/p6_2_2_1.jsp?lingua=italiano&id=3268
5. Acheson ED. On the state of the public health [The fourth Duncan lecture]. Public Health. 1988 Sep 1;102(5):431–7

Dr. Francesco Bassan:
Se podrá lograr una sanidad más segura y equitativa si la sanidad pública adopta la simulación como herramienta integrada para alcanzar los objetivos de calidad y seguridad perseguidos por la gobernanza clínica. La simulación, a su vez, tendrá un impacto más incisivo si sabe incorporar la visión y las competencias de la sanidad pública, respondiendo así de manera adecuada a los retos globales.”

Prof.ssa Tatjana Baldovin:
“En el ámbito de la salud pública, estamos explorando una metodología ya consolidada en el ámbito clínico, con el objetivo de innovar en la enseñanza y la investigación. El objetivo es mejorar la formación para elevar la calidad de la asistencia, aumentar la seguridad de los pacientes y garantizar un acceso equitativo a servicios sanitarios de alta calidad.”

Prof. Vincenzo Baldo:
“Estamos promoviendo la adopción de metodologías didácticas innovadoras, como el uso de la Realidad Virtual Inmersiva (RVI), para mejorar la experiencia formativa de los estudiantes. Estas tecnologías permiten crear simulaciones realistas e interactivas, facilitando el aprendizaje práctico y teórico. El objetivo es potenciar las competencias de los futuros profesionales, haciendo que la enseñanza sea más atractiva y eficaz, y preparándolos para afrontar los retos del mundo real con herramientas de vanguardia.»
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