Debriefing Clínico: De la simulación a la práctica diaria – Una conversación con Méryl Paquay

Redazione SIMZINE
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En este episodio de SIM Moove, Fouad Marhar se sienta con Meryl Paquay, experta en debriefing clínico y figura clave en el mundo de la simulación sanitaria de la Universidad de Lieja (Bélgica). Su conversación, rica en ideas, aborda la evolución de las prácticas de debriefing, los retos de integrarlas en entornos clínicos y el profundo impacto que pueden tener en la dinámica de los equipos y en los resultados de los pacientes.

Una exclusiva de SIMZINE basada en la entrevista del podcast SIM Moove con Méryl Paquay

En el animado mundo de la simulación sanitaria, pocas innovaciones han resultado tan prometedoras para salvar la distancia entre la formación y la práctica clínica como el debriefing clínico rutinario. En un reciente episodio del podcast de simulación sanitaria de SIMZINE, el presentador Fouad Marhar explora este enfoque transformador con Méryl Paquay, una enfermera investigadora pionera de Lieja (Bélgica), cuyo trabajo está cambiando la forma en que los equipos sanitarios se comunican, aprenden y crecen.

Serendipia en la simulación: El viaje de una investigadora

«No era en absoluto algo que hubiera planeado», admite Méryl con una sonrisa en la voz, al describir su entrada en el mundo de la simulación. Tras finalizar sus estudios de enfermería y un máster en gestión de la sanidad pública, fue contratada por el centro de simulación de la Universidad de Lieja para trabajar en proyectos de investigación europeos. Lo que empezó como un puesto centrado en la seguridad sanitaria evolucionó rápidamente hacia una búsqueda apasionada de metodologías de debriefing y Gestión de Recursos en Crisis (CRM).


En lugar de elegir entre sus dos amores profesionales -la gestión hospitalaria y la simulación-, Paquay encontró la forma de fusionarlos. Esta síntesis dio lugar a su trabajo pionero en el debriefing clínico, con el apoyo de dos influyentes mentores: El profesor Alexandre Ghuysen (conocido como Sacha) y el profesor Robert Simon de Boston, a quien acredita como «el supuesto básico personificado».

Debriefing clínico: Una herramienta de gestión

Una de las aportaciones más significativas de Paquay a este campo es aclarar la terminología, a menudo confusa, del debriefing clínico. Describe dos enfoques distintos, cada uno con fines diferentes pero complementarios:

  1. Debriefing clínico posterior al acontecimiento: Estas sesiones siguen a situaciones de emergencia o críticas, y se centran en mejorar las habilidades técnicas y no técnicas. Suelen durar más tiempo y profundizan en incidentes concretos para extraer puntos de aprendizaje y mejorar las respuestas futuras.
  2. Debriefing clínico rutinario: Son sesiones programadas más cortas (7-12 minutos) que se centran principalmente en el aprendizaje organizativo. Tienen lugar de 2 a 4 veces por semana y crean un ritmo regular de reflexión y mejora.

El proceso de debriefing clínico rutinario, aunque comparte ADN con el debriefing de simulación, se ha adaptado cuidadosamente al entorno clínico de ritmo rápido. Sigue un formato ágil pero eficaz:

  • Una breve bienvenida y comprobación para medir la energía y disposición del equipo.

  • Debate abierto sobre las experiencias del día, celebrando los éxitos y reconociendo los retos

  • Análisis centrado en un elemento concreto para buscar soluciones

  • Resumen claro y planificación de acciones para la puesta en práctica

Esta estructura garantiza que, incluso en entornos clínicos ajetreados, los equipos puedan mantener una comunicación y un aprendizaje constantes sin interrumpir la atención al paciente.

Medir el éxito: Los datos detrás del diálogo

La implantación de sesiones informativas clínicas rutinarias ha dado resultados impresionantes en múltiples dimensiones. A nivel organizativo, Méryl informa de un cambio fundamental en la dinámica de gestión. «Realmente ayuda a lo que llamamos gestión ascendente», explica, describiendo cómo ahora los equipos no sólo identifican los problemas, sino que proponen soluciones, creando una estructura de liderazgo más participativa. Las reuniones informativas permiten a los líderes mantenerse en contacto con la realidad sobre el terreno, al tiempo que dan al personal un sentido de propiedad sobre las soluciones a los problemas a los que se enfrentan. El resultado es un entorno de trabajo más sano y colaborativo, en el que todos se sienten escuchados y valorados.


Méryl subraya que este tipo de bucle de retroalimentación -en el que los equipos proponen soluciones y los líderes aplican y comunican las decisiones- puede mejorar enormemente la cultura organizativa. «Hace que el liderazgo sea más visible y demuestra que sus acciones están alineadas con las necesidades del personal», señala. Esto, a su vez, ayuda a generar confianza y refuerza las relaciones entre los equipos sanitarios y la dirección.

El impacto va más allá de los organigramas. «Hemos observado un aumento significativo del número de sucesos indeseables que se denuncian, así como una mayor disposición a hablar en general», explica Méryl. Esta cultura de apertura, en la que los miembros del equipo se sienten seguros para expresar sus preocupaciones y ofrecer su opinión, es esencial para mejorar la seguridad del paciente y fomentar un entorno de aprendizaje. Además, Méryl destaca un fenómeno que describe como «autoinformación», en el que los equipos empiezan a autoinformarse sin facilitación formal. Esto, dice, es un testimonio del poder del debriefing rutinario para crear una mentalidad de reflexión y mejora continuas. «Incluso los que no están formados formalmente en simulación se plantean ahora preguntas reflexivas durante su trabajo, lo cual es una gran victoria», afirma.

El efecto imán: Atraer y retener la excelencia

Durante la crisis de COVID-19, el equipo de investigación de Méryl llevó a cabo un esclarecedor estudio en el que se examinaba la relación entre el debriefing clínico y el concepto de «hospitales imán», instituciones sanitarias conocidas por su capacidad para atraer y retener al personal, manteniendo al mismo tiempo unos resultados excelentes para los pacientes. El estudio, que incluyó 100 entrevistas cualitativas, reveló fuertes vínculos entre la implantación del debriefing y la mejora del magnetismo hospitalario.


De la investigación surgieron varios factores clave:

  • Fortalecimiento de las relaciones médico-enfermeras mediante una comunicación regular y estructurada

  • Mayor confianza entre los distintos grupos profesionales

  • Oportunidades diarias de aprendizaje y crecimiento profesional

  • Aumento de la inteligencia organizativa mediante el aprendizaje sistemático tanto de los éxitos como de los contratiempos

  • Mejora de la resistencia y la adaptabilidad del equipo ante los retos.

Rigor científico y horizontes de futuro

Aunque los resultados iniciales son prometedores, Méryl mantiene un compromiso con la validación científica rigurosa. Aboga por enfoques de investigación más exhaustivos, que incluyan:

  • Estudios multicéntricos para validar los resultados en distintos entornos sanitarios
  • Medición a largo plazo del bienestar a nivel individual, de equipo e institucional
  • Análisis de la interacción entre los distintos niveles de resiliencia
  • Investigación de los factores estacionales y contextuales que afectan a la eficacia del debriefing

«Tenemos distintos niveles de resiliencia», señala, y subraya la importancia de comprender cómo afecta el debriefing a cada capa del sistema sanitario. Este enfoque multicapa de la investigación refleja la complejidad de las organizaciones sanitarias y la necesidad de una comprensión matizada de las iniciativas de mejora.

Sabiduría práctica para los simulacionistas

Para quienes se sientan inspirados para implantar el debriefing clínico en sus propias instituciones, Méryl ofrece valiosas orientaciones extraídas de su experiencia:

  1. Mantente fiel a tu pasión y confía en tus instintos sobre las posibles aplicaciones
  2. Evita las ideas rígidas sobre lo que constituye una simulación o debriefing «adecuados

  3. Empieza poco a poco, pero mantén la coherencia en la aplicación

  4. Céntrate en crear seguridad psicológica antes de esperar un diálogo abierto

  5. Documenta y haz un seguimiento de los resultados para conseguir apoyo para el programa

Como ella dice: «Si ves un vínculo con la simulación, aunque la gente te diga: “No, pero eso no es simulación”, adelante». Esta apertura a la innovación, combinada con el rigor científico, caracteriza el enfoque de Méryl para hacer avanzar el campo.

El futuro de la investigación sobre el debriefing clínico

En un panorama sanitario cada vez más centrado en el bienestar del paciente y del personal sanitario, el trabajo de Méryl sobre el debriefing clínico ofrece una vía práctica hacia equipos sanitarios más colaborativos, reflexivos y, en última instancia, más eficaces. A medida que este campo siga evolucionando, su investigación promete ayudar a salvar la distancia entre el aprendizaje basado en la simulación y la práctica clínica diaria, creando entornos sanitarios en los que la mejora continua no sea sólo una aspiración, sino una realidad cotidiana.


El objetivo final, tal y como Méryl lo ve, es crear entornos sanitarios en los que hablar sea normal, el aprendizaje sea continuo y tanto los pacientes como los proveedores prosperen. Gracias a los informes clínicos rutinarios, esta visión es cada vez más factible, conversación a conversación.

Conversación completa disponible en francés en SIM Moove

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