Delegados del centro de simulación iraquí CSTC en Italia para un proyecto de cooperación internacional: un momento de intercambio cultural y profesional
“Un centro como el CSTC es único en todo Kurdistán”, “El CSTC es único en todo Irak”, “El CSTC es único en Oriente Medio”. Estas frases pronunciadas en los actos de inauguración y presentación del proyecto son evidentemente hipérboles que, sin embargo, dan una idea de lo visionaria que ha sido la apertura de un centro de simulación clínica avanzada, equipado con tecnologías de última generación, en un lugar como el Kurdistán iraquí, en el marco de un proyecto de cooperación internacional implementado por AISPO.
AISPO, la Asociación Italiana para la Solidaridad entre los Pueblos, es una Organización No Gubernamental especializada en la implementación de proyectos en el sector de la salud y operativa en muchas áreas de crisis, como el Kurdistán iraquí, Sudán, Sudán del Sur, Egipto, Sierra Leona, Mozambique y Colombia.
En diciembre de 2019, AISPO inició un proyecto, financiado por el gobierno alemán, que tenía como objetivo crear un centro de simulación en Duhok en paralelo con la apertura de una nueva sala de emergencias. Los desafíos fueron difíciles: importar e instalar tecnologías y maniquíes, capacitar personal en uso y mantenimiento, capacitar a entrenadores que no estaban familiarizados con la enseñanza basada en simulación. Luego vino la pandemia: fronteras cerradas para bienes y personas, escasez de materiales, imposibilidad de viajar.
Pero el equipo de AISPO no se desanimó y, con el asesoramiento y la ayuda del Dr. Pier Luigi Ingrassia del CeSi de Lugano, organizó un curso online en la plataforma Moodle para entrenar a futuros formadores, en el que participaron profesores internacionales y expertos en la materia. Tras una minuciosa reforma encaminada a crear espacios eficientes para la formación en simulación, se instalaron 57 maniquíes y task trainers, además de ordenadores, servidores, cámaras, micrófonos y proyectores. En diciembre de 2020, el centro se inauguró oficialmente en presencia del Ministro de Salud, Cónsules y Embajadores kurdos. Después de unos meses de preparación, en junio de 2021 comenzaron los cursos para enfermeras de emergencia en los hospitales de Duhok.
A poco más de un año de la apertura del CSTC, se organizaron becas en el centro de simulación SimLab de la Universidad Vita-Salute San Raffaele, dirigidas por el Dr. Giacomo Monti. El director y subdirector del CSTC, cinco enfermeros y médicos y dos gerentes de la Dirección de Salud de Duhok llegaron a Milán para un curso de capacitación de diez días, que contó con la participación de varios expertos: un equipo multicultural y multidisciplinario ha hecho posible un momento de intercambio cultural, profesional y de experiencias. La visita al Centro de Formación y Simulación IR & TeC-AREU, encuentros ad hoc sobre los principios fundamentales de funcionamiento de los equipos de simulación, realizados directamente por las empresas [Accurate e Laerdal], han permitido conocer mejor el potencial y los límites de los simuladores y task trainers disponibles en el CSTC. El trabajo sobre team working y team building, junto al psicólogo Luca Mingarelli, mostró que trabajar en equipo implica sacrificios individuales, a favor de una actitud inclusiva de los valores, principios y pensamientos del grupo, diferente al del individuo, pero más rico. También hablamos de cómo en Duhok se usa una cuchara para cortar la carne y que en Milán sería más cómodo comer pizza si llegaba ya cortada en gajos, nos reímos de buena gana pero nadie tenía la intención de cambiar sus (¡sagradas!) costumbres sobre la comida. Las jornadas de briefing, debriefingy feedback permitieron fortalecer la realización de las simulaciones. Junto con el prof. Giorgio Capogna y el Dr. Daniel Pasquali, discutimos la elección de palabras o frases individuales, la proxémica del cuerpo y lo que comunicamos con él, la importancia de la organización del escenario en línea con el objetivo. Finalmente, un taller también dedicado al Basic Life Support: una comparativa entre los colegas kurdos del CSTC, cuya experiencia también se deriva de muchos años de conflictos y emergencias, y los colegas italianos, ha aportado importantes ventajas tanto desde un punto de vista metodológico como de contenido.
De estos días hemos aprendido que existen innumerables formas de trabajar, todas apropiadas (aunque distintas) y efectivas para lograr el mismo objetivo en diferentes contextos. El camino de crecimiento fue estimulante y desafiante: el intercambio representó una inspiración para cambiar hábitos y crear un espacio en el que la diversidad pueda expresarse, enriqueciendo las relaciones educativas y humanas.
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